¿La filosofía, muerta?
Hace poco me topé con un tema que había dejado en el tintero y cuyo titulo es ... "la muerte de la filosofía", sentencia hecha nada más y nada menos que por Stephen Hawking, allá por el 2011 en su libro “El gran diseño” co-escrito con Leonard Mlodinow. Levantó airadas críticas y comentarios afiebrados de filósofos del calibre de Umberto Ecco, que destroza los argumentos blandidos en el mentado libro de forma magistral y simple. Alegando que probablemente no fue prudente confiar el destino de la filosofía a personajes de una serie de ciencia ficción. Refiriéndose al Sr. Mlodinow como guionista de Star Trek. (cierto !)
En fin, sin embargo este tema de la muerte de ideo-logismos y tendencias no es nada nuevo. En otro artículo sobre la actualidad en filosofía aparece un contemporáneo de Umberto, el Filósofo alemán Peter Sloterdijk, que en su ensayo ( Die Zeit Sept. 1999) “Normas para el parque humano”, aparece sentenciando la extinción del humanismo en manos de una sociedad individualista, tecnócrata y violenta. Convencido promulga que el rol de la educación en el sentido humanista esta en extinción, arrollado por los valores del capitalismo y el dinero. Sloterdijk afirma que la retirada del humanismo no tiene vuelta atrás y que los procesos de tensión social y neobarbarie (!) serán cada vez más profundos y más extendidos en el mundo. Para leer verdaderamente.
Desde otra perspectiva, los trabajos de John Searle, filósofo norteamericano, célebre por sus contribuciones a la filosofía del lenguaje y de la mente, conocido por su experimento mental llamado el argumento de la "habitación china", demuestra que el pensamiento humano no se compone de simples procesos reducibles a algoritmos computacionales. ¿Que dirían sobre esto mis amigos economistas que pretenden reducir al ser humano a un homúnculo llamado “homo economicus” y a partir de esto elaborar teorías de prediccón y control económicas y ponerlas en practica ademas?
Visto lo anterior, la filosofía no puede estar más viva hoy y es necesaria. La motivación de estas líneas es poner estos pensamientos en perspectiva e inspirar a la auto-educación. Un concepto que aparece con mayor frecuencia en las redes sociales. No puede ser que la vida sea sólo reggaeton y farándula. La revolución que viene debe ser contra la cultura de masas que los medios nos inducen. Saquen lo positivo ante tanta información digital disponible. La filosofía no ha muerto.
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